Si duermo – sueño contigo.
Si despierto – pienso en tí.
Dime, tú, compañerita,
Si te pasa lo que a mí.
Amarillo es el oro,
Blanca es la plata.
Y azules son los ojos
Que a mí me matan.
Algunos van a la cárcel
Por robar una moneda.
Y tú me robas el alma,
Y nadie te pide cuenta.
Si me miras y te miro,
Los dos bajamos los ojos.
Y no nos decimos nada.
Y nos lo decimos todo.